Guias de Vinos en Venezuela

        A medida que uno se va haciendo más aficionado al vino empieza a buscar y a probar otros vinos más allá de los que ya conoce. Y es aquí en donde se complica la cosa. ¿Cuál vino comprar? ¿Hasta que monto estoy dispuesto a gastar por ese vino?. ¿Me gustará o perderé el dinero? No quisiera sentirme defraudado, etc, etc. Si uno quisiera encontrar ese vino tan rico que esta buscando con la justa relación precio-valor, en principio debería probar todos los vinos que hay en el mercado. En Venezuela, a pesar de ser un país que solo tiene una bodega productora vinos (Bodegas Pomar) se importan mas de 1700 etiquetas diferentes. Un número realmente asombroso! Haciendo simple matemática, eso da que debo tomar algo así como 36 botellas de vinos a la semana!!, Ufff!!, para que al final del año haya probado las 1728 etiquetas diferentes Cosa que mi bolsillo y mi hígado lamentablemente, no resistirían. Además, hay que considerar eso de la añada. Si pruebo un determinado vino cosecha 2007, cuando termine las 1700 botellas es probable que ya este en el mercado la cosecha 2008, y como entre cosecha y cosecha la calidad del vino puede variar… Chanfle!.... Hay que volver a empezar desde el principio. Encontrar ese vino, El vino, se convierte entonces en una empresa un poco titánica, sobre todo si eres ese tipo de personas que como yo, la diosa de la suerte no acostumbrar acompañar y cuya economía esta bastante deteriorada.

         Afortunadamente en Venezuela han aparecido dos guías sobre los vinos que se consiguen en el mercado local, estas son: la Guía del Vino de Vladimir Vitoria y la Guia  Exceso de vinos.  Estas guías no pretenden ser en ningún momento ser Santa Palabra, sino más bien un faro, una orientación, una ayuda. Como escribe Viloria en la introducción de Guia del Vino “El aficionado, luego de catar el vino seleccionado, podrá estar de acuerdo o no con mi puntaje, y un poco de eso se trata. El puntaje es solo un guiño para que el aficionado se acerque con un poco mas de confianza a un producto que no conoce…”. Ambas están bien elaboradas, y son muy útiles a la hora de comprar vinos. Personalmente he tenido mis acuerdos y desacuerdos con estas guías, pero lo que si debo reconocer es que gracias a ellas he probado vinos que en general, no hubiera comprado.

         En esta nota quiero hacer un reconocimiento al grupo exceso, a Valdimir Viloria, a los importadores, al grupo de sommeliers que trabajan de incógnitos y en la sombra en la elaboración de estas guías, y a todos aquellos que de una u otra manera hacen esto posible. Un brindis para que estas guías continúen apareciendo año tras año.

Salud,

Anibal