La noche comenzó como siempre, igual, límpida, aburrida y sin futuro.
Un amigo llamó. Fui a su casa a cenar. Lleve como era de esperarse dos vinos que pudieran armonizar con el prometido Risotto de Prosciutto crudo. El vino corrió por la noche y la cena hizo honores al vino. Sentados en la mesa, me reencontré con unos ojos que había olvidado. La tristeza y la sonrisa armonizaron con el risotto y el vino.Y como la imagen de esta nota, en un momento…., su melancolía marido con el conjunto, como queriendo huir. Las palabras sin imposturas. Las miradas sin engaño, se cruzaron. El vino se hizo cómplice de la noche. Los labios sonrieron, y sus manos tocaron la copa como queriendo tocar lo imposible. Pruebo el tinto y la miro de soslayo. Su sonrisa se hace cómplice de algún deleite secreto y de la armonía de los platos preparados por nuestro anfitrión. El pan elaborado de manera artesanal, se disuelve en mi boca y evoca innumerables recuerdos olvidados. Es excelente.
El tinto pelea con el risotto y no termina de armonizar. Hay cierta armonía y a la vez una desarmonía que fastidia. Es como esas relaciones inconclusas, inacabadas, que no terminan de cuajar. El prosciutto pierde fuerza y la fatalidad se hace presente. Vuelvo al risotto y a lo esencial de la vida. El tinto se acaba. El momento se hace fugaz. Termino la noche con una conversación intima, como una pequeña plaza, con la anfitriona y la esperanza de un nuevo encuentro y una mejor armonía.
Alta Vista Premiun Cabernet Sauvignon 2007. Complejo, firme, persistente, cuerpo medio. Agradable en boca. Buena nariz. Para beber solo. No marida bien con el de Prosciutto crudo
Santé!
Anibal Sierraalta
P.D: según la RAE: Desencuentro: m. Encuentro fallido.( http://buscon.rae.es/draeI/)
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